miércoles, 21 de septiembre de 2011

Proceso de Regionalización en Chile... ¿Descentraliza el país y fragmenta el espacio público?

Con el paso de los años siempre ha sido tema los problemas de centralización del país, toda la atención está puesta en la Región Metropolitana, hasta que por alguna catástrofe de nuestro accidentado país o por alguna tragedia nos acordamos que existen otras regiones, el proceso de regionalización de Chile fue gradual, hasta llegar a las 15 regiones que componen nuestro país administrativamente hablando, en primer lugar la conformación de regiones por la Corfo se basó en una aglomeración geográfica de los seis paisajes más comunes y disponer de un ente administrativo que velara por las necesidades de cada una de las regiones presentes en el país. Posterior a ello, en 1965 la Odeplan subdivide estas seis regiones en doce, basándose en la presencia de polos de desarrollo o cuidad principal que sirvieran de sustento para ser regiones más independientes y alcanzar la descentralización del núcleo central. Pero es ya en 1974 con la Conara cuando ya toma sentido y peso el proceso de regionalización, ya que es aquí donde se plantean objetivos tan precisos como Incrementar la integración nacional, Desarrollar un sistema de Seguridad Nacional, Alcanzar un desarrollo económico, Descentralización político-administrativa del país, Transferencia de competencias desde la administración central a otras administraciones, es decir todos aquellos principios que actualmente siguen siendo desafíos para nuestro país, a esto se le agregan en 2007 dos regiones más orientadas a seguir cumpliendo con los preceptos formulados por la Conara. Pero desde el punto de vista que he abordado mediante las entradas anteriores, el hecho de seguir disgregando al país, ¿Es un acto integrador? O sucede similar a lo que he planteado como “condominionización” (entendido como el querer imitar el sistema de condominios en clases sociales altas, seguridad en todo sentido, formación de elites o grupos reducidos de individuos) donde la gente se autosegrega del entorno, eliminando o reduciendo aun más los espacios públicos.

Condominionización de los espacios públicos

Un tema de relevancia dentro del espacio público, corresponde a la "Privatización del Espacio Público", que corresponde a una forma de auto segregación residencial, que ha materializado por medio del cierre de calles, realizado por sus propios habitantes, o bien por las municipalidades encargadas que por ejemplo, en parques han enrejado su entorno, han dispuesto de una tarifa especial para el ingreso, disponen a su vez de guardias de seguridad, también reservan el derecho de admisión y prohiben el desarrollo de ciertas actividades en su interior.
Me llama bastante la atención cómo estos grupos hacen lo imposible por cercar sus calles, es una idea de que mientras más altas sean las rejas más protegidos están, es un sentido de condominionización, una imitación sencilla a los condominios, pero en el caso de gente de menor recurso, el aislarse de su entorno que es igual, tanto adentro como afuera, los hacer verse extraños, llaman más la atención, son ellos mismos los que se segregan y por medio de rejas y restricciones acaban con el vital espacio público. Las redes sociales de protección que son vitales en poblaciones, en caso de incendios, o asaltos, desaparecen, ya no está el vecino con el cual converso, sino que se convierte en un extraño, con el cual ni siquiera he cruzado miradas amistosas.

La Plaza, el núcleo dentro las líneas de la movilización

Desde el punto de vista de las actuales e históricas movilizaciones sociales, orientadas a distintas temáticas pero utilizando similar modo de operar, me quiero referir al sentido de pertenencia que emana de estos grupos respecto a los espacios públicos, éstos son vitales para el encuentro, el punto neurálgico donde se desarrollan los actos culturales y las vocerías expresan su sentir al resto de participantes y por que no, de transeúntes que también se congregan, ya sea por mera coincidencia o como por curiosidad a saber qué sucede. En este sentido es como los espacios públicos, en este caso las plazas, toman relevancia, ya sea por su peso histórico como un punto de encuentro, o bien un espacio habilitado, libre de barreras donde no hay ninguna distinción social, ni control que prohiba su libre acceso. Dentro de la gran cantidad de líneas y vértices, la plaza corresponde al núcleo, el punto nodal de la movilización, con esto no se le quiere restar importancia al valor de las líneas, las calles por las cuales se "moviliza", que también ha de tener características particulares para que el tránsito de los participantes sea adecuado, interrumpa el tránsito (llamando la atención popular) y que la infraestructura sea adecuada para contener el gran grupo de personas que transita, junto con los llamados de las autoridades pertinentes a que se resguarde la seguridad, tanto de los participantes como también de transeúntes y comerciantes que se vean involucrados.
Dentro de esto también es de relevancia considerar lo que muchas veces se conoce como el punto negro de las movilizaciones, como son los típicos desadaptados y bien llamados delincuentes que liberan su ira en contra de carabineros, que con trozos de moviliario urbano, extraido de calles y de nuestras plazas utilizan como los mejores proyectiles, es aquí donde aflora el arraigo, el sentimiento de pertenencia, y cuidado de nuestros espacios e infraestructura por parte de los habitantes y que últimamente hemos podido apreciar en las noticias como los mismos manifestantes tranquilizan a los delincuentes calmando el deseo prehistórico de tranquilizar a las bestias...

Soy de La Cruz

Para mi, una crucina de nacimiento tiene mucho más valor mi plaza y quiero hacer énfasis en lo que he resaltado como "mi plaza" con esto me refiero al sentido de pertenencia que he generado y como yo, la mayoría de quienes comparten mi historia y aumentando el nivel escalar a todos los habitantes de distintas comunas sienten con la misma. Una conjugación de historias, experiencias vividas comunes que han generado mi arraigo, donde no representa vital para el sentimiento de los crucinos que sucedío hace cien años atrás, no es de relevanciapopular la historia de su fundación, ni de cómo se generó su trazado inicial, sino que toman relevancia los eventos populares, como la fiesta de la primavera que se desarrollaba en la infancia de mi madre,, o de los aniversarios que congregaban gran cantidad de población a ver los llamativos artistas nacionales.
con esto me refiero a que la plaza es escencialmente social, es así como siento que muchas plazas o plazuelas se ven abandonadas, se crean por la necesidad de cumplir con tener espacios o áreas verdes dentro de las villas o pequeñas poblacioes, que se crean, es decir no nacen para saciar la necesidad del hombre de entrar en contacto con sus similares, estas plazas no son sociales, por ende no existe un peso valorativo ni de arraigo a este espacio, a nadie le interesa regar los pequeños arbustos, ni repintar los rallados populares.

martes, 24 de mayo de 2011

La plaza en una nube

Wordle: Plazas

La imagen presentada resume la actual concepción de una plaza, contempla una serie de conceptos que entrelazados generan una nube conceptual, no se hace diferencia visual entre lo positivo de lo negativo, puesto que esta estructura de organización cualquier persona puede acceder a una plaza, no hay una difenciación elitista, ni racial, llegando aún a una integración entre especies animales, aunque muchas no tienen el carácter de parque municipal, muchos  habitantes concurren para pasear a sus mascotas y claro, adicionando a los animales que encuentran un refugio para pasar sus días. La plaza es pública y abierta, cada quién realiza las actividades que desee en la medida de lo posible, es así como algunas también disponen de una pista atlética, que es instaurada por la municipalidad hacia los vecinos, de ahí según el entorno es su cuidado y mantención en el tiempo. Además según la historia comunal, es cómo ha sido desarrollada, si bien es fundamental desde es punto de vista del plano damero, o bien a surgido de manera espontánea ante futuras necesidades poblacionales.
Pero más que eso no se quiere ahondar... entenderla como un sistema de redes, una parte del todo comunal.

miércoles, 4 de mayo de 2011

¿Juntémonos en Facebook?

Con el paso del tiempo la idea romántica de nuestros centros urbanos públicos, donde la accesibilidad y centralidad es vital se ha ido transformando, siguiendo los ritmos de la población, las plazas también se han visto afectadas por este dinamismo poblacional, ya no representando un espacio habilitado y disponible para el intercambio, aunque cabe hacer alusión que en como todo orden de las cosas existen excepciones, como es el caso de dirigirse a una plaza por fines turísticos o bien para hacer un alto a la rutina.
Muchas veces hemos pasado por una plaza y sentimos esa sensación de inseguridad, esa idea de no saber con quién estoy perturba muchas mentes ¿Será una sensación de poco arraigo con este espacio y su gente? Como hace alusión Castells “En términos propiamente culturales, lo local y los lugares se convierten cada vez más en trincheras de identidad”, considerando ello, se presenta en ciudades grandes como Valparaíso donde la diversidad cultural se hace altamente presente, ya sea por la población flotante, como estudiantes, trabajadores, turistas, entre otros; como también por el origen mestizo de la población porteña.
No es justo culpar a la Globalización de todos los fenómenos actuales, pero será que en la función y sentido de las plazas esta ha prohibido el encuentro ¿El hacernos una sociedad diversa prohíbe que se siga potenciando y creciendo nuestra cultura?. Aquí también es posible preguntarse ¿El otro me sirve? ¿El otro me ayuda en mi formación? O de manera más sencilla y despectiva ¿El otro es capaz de darme algo?. Desde el punto de vista del individualismo, yo no tendría por qué interactuar con alguien que no conozco o más bien no reconozco, la plaza es un lugar, un espacio público sin prohibiciones de ingreso por “facha” es donde puedo estar con alguien totalmente distinto a mi, desde el punto de vista del desarrollo personal a través de relaciones interpersonales resulta muy atractivo, a partir de un pequeño intercambio de palabras puedo conocer un nuevo mundo, ajeno a mi realidad, pero nuestro individualismo, con gotas de clasismo, prohíbe la anhelada interacción.
Otro de los espacios públicos, pero en este caso privado, corresponde a los malls, entendido como una articulación de un lugar creado con múltiples intensiones, apuntadas a satisfacer las necesidades del hombre, en este espacio, el hombre que se siente de un mayor nivel, se dirige a un típico paseo dominical, se siente entre los suyos, cabe destacar que estos también se diferencian por la proximidad a sectores urbanizados distintivos, pero aquí el padre de familia se siente más tranquilo que en una plaza, aquí hacen presencia los guardias, los vendedores que no “chiflan” ante la presencia policial, el hombre aquí dispone de un estacionamiento personal, libre de delincuentes. Pero claro ante cada circunstancia existen excepciones, ni los malls se salvan de la presencia de delincuentes, de individuos que con su sola presencia intimidan al padre de familia que confiado se dirije a este encuentro con el resto, donde su resto, en el que muchas veces ni siquiera hay un encuentro, sino el flujo económico otorgado por el consumo.
¿Será que estas articulaciones, se sea plazas o mal no permiten una sociabilización para con el otro, sino como el caso de los malls con los nuestros solamente o que las plazas al ser espacios abiertos permiten que la inseguridad domine el pensamiento de transeúntes?
En las últimas dos décadas ha surgido una instancia, un espacio público que ha suplido esa carencia identitaria, esa necesidad de conocer, sociabilizar, distraerse, en otras palabras de interactuar, correspondiendo al ciberespacio, donde los flujos de información son el elemento básico, Castells hace alusión a esto, generalizando los espacios existentes en tres temáticas; en primer lugar afirma la existencia del “Espacio de Flujos Instrumentales”, relacionándolo con lo planteado en los párrafos anteriores este espacio instrumental, corresponde a la plaza, situada de manera central en la configuración de la ciudad y con múltiples posibilidades de acceso, teniéndo aspectos de monumentalidad y expresión cultural típica; el segundo espacio se refiere al lugar en donde los habitantes se dirigen de manera esporádica, ya sea a comer o al popular “vitrineo”, haciendo una definición del concepto como el “Espacio de Satisfacción Personal”, aquí el individuo se siente parte de un todo entre sus pares; y por último se deduce la presencia del “Espacio de Sociabilización Neta” donde los riesgos y falencias de los anteriores se ven eliminadas, ya que este espació más bien instancia o lugar etéreo tomo sentido en las relaciones interpersonales en los distintos flujos de información.
Desde un punto de vista práctico y ejemplificador es hoy Facebook, un “lugar” dispuesto para la sociabilización, permite intercambiar experiencias, borrar las distancias, generar redes, expresar intereses, informarse, distraerse, ser amigo de famosos, saber quién es mi vecino y un sinfín de otras actividades que en la medida que se hagan de buena intención (representando el ideal) será un uso adecuado de este espacio, es por eso que la expresión “¿Juntemonos en Facebook?” no representa un absurdo, más bien es algo que los usuarios entendemos no como un lugar “no lugar” sino como que existe, porque lo vivimos, lo sentimos y lo vemos cada vez que ingresamos nuestra contraseña.
La presencia de tres espacios no prohíbe que puedan desarrollarse en su conjunto y porque se tiene de uno se debe prescindir de los otros, sino que la inserción de las personas en estos hace que los flujos  sean mucho más interesantes, que sean más diversos aportando de distinta manera a la configuración tanto física como social de la ciudad.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

  • CASTELLS M. “Espacios Públicos en la Sociedad Informal” 

  • PERAHIA R. “IX Coloquio Internacional de Geocrítica;  Los problemas del mundo actual, soluciones
                        y alternativas desde la Geografía y las ciencias sociales.”  


  • QUESADA F. “Imaginarios urbanos, espacio público y ciudad en América Latina”

  • LANGE C. “Espacio Público, Movilidad y sujetos urbanos” (Tesis)

  • EURE Vol. 28 N° 84 “El espacio público en el debate actual: Una reflexión crítica sobre el    urbanismo post-moderno”

miércoles, 20 de abril de 2011

Ahora nadie me alimenta, diario de una paloma porteña.

En la actualidad referirse a las plazas de Valparaíso, nos genera reacciones diversas, ya no existe la concepción típica de un punto de encuentro de sociabilización entre los habitantes, el sentimiento se ha modificado, muchas de las plazas se han distinguido por su función, ya sea comercial, histórica, cultural, etc. Cabe considerar, en el contexto de Valparaíso como ciudad patrimonial, las plazas de mayor envergadura tales como Plaza Aníbal Pinto, Plaza Echaurren, Plaza Sotomayor, Plaza O´Higgins y la característica Plaza Victoria, todas ellas se caracterizan por su función histórica y gran peso cultural. Por ejemplo, para fin de esta publicación se ha trabajado con la Plaza Aníbal Pinto, la cual fue declarada zona típica y de protección en 1976 ya que corresponde a la unión entre cerro y plan. En otros términos esta plaza corresponde a un pulmón y un ecosistema dentro del plan, que permite a los turistas identificar parte de la biodiversidad de Valparaíso. Pero, ¿Es lo mismo que observan los porteños? A través de entrevistas locales, ha sido posible identificar cierto grado de desconformidad por parte de los habituales transeúntes, ya que se argumentan en distintos aspectos, en primer lugar, la feria artesanal dispuesta en el frontis (Av. Pedro Montt) prohíbe el normal paso y “encierra” a la plaza, aunque la feria temporal atrae transeúntes, los segrega de la plaza misma, en sí la plaza queda fraccionada, perdiendo la normal concepción de espacio abierto para la población.
Otro tema que se ha destacado y presenta desagrado para parte de los encuestados corresponde al mal estado de las bancas dispuestas, ya que hay pocos habilitados, lo que prohíbe detenerse de la rutina y disfrutar de las bondades de la plaza. Esta plaza se encuentra próxima a colegios y liceos, por lo tanto la reunión de adolescentes es habitual, lo cual genera molestias para la tercera edad que son el grupo etario que domina estos espacios públicos, y cierto porcentaje de turistas nacionales e internacionales, la reunión de adolescentes está ligada a gritos, risas, grupos, vicios, amoríos, en sí, un patio del colegio sin inspectores ni reglas, donde los “pingüinos” terminan de desarrollar los aspectos más prohibidos de su personalidad, y claro totalmente desagradable para los adultos mayores, que aunque tengan sus típicas “mañas de viejos” para cualquier transeúnte resulta un tanto intimidante.
De manera recurrente surgen las molestias correspondientes a la presencia de animales, en especial de perros vagos y las palomas, aunque a estas se les reconoce como altamente infecciosas, no son una molestia presente en la Plaza Aníbal Pinto, fundamentando tal afirmación en una pregunta de una transeúnte -¿Y, sin las palomas a quiénes les daremos las miguitas de pan?-. Bueno, continuando con los perros, aunque muchos generan lazos afectivos con los transeúntes o generan cierta simpatía al hacer un pequeño movimiento con su cola o si bien portan un collar que refleja su situación reproductiva, son para muchas personas portadores de plagas como las pulgas o enfermedades que los deterioran y desgastan en su aspecto físico, junto con la delicadeza que presenta el pasto para definirlo como baño y los árboles de nuestra porteña biodiversidad para determinar su perecido territorio.
Mucho más allá de los temas antes mencionados relacionados con la percepción de los transeúntes, hay una tendencia reconocida en Latinoamérica como una nueva organización de los espacios públicos urbanos, es una “nueva forma de organización real y simbólica de los espacios de la ciudad, como resultado de una manera diferente de vivir, pertenecer y de relacionarse con ella”. Es una idea de ciudad fraccionada llena de muros y límites donde los habitantes no sólo se pueden ver, sino que también no se reconocen como vecinos, a su vez, se entienden como espacios urbanos, aquellos que irrumpen una trama normal, un vacío entre las calles, donde cada quien hace lo que le interesa, o como a muchos, no les interesa hacer algo, con el paso del día, muchos de los trabajadores o estudiantes no están dispuestos a pasar el tiempo sentados en una plaza que por ser común de verla no presenta ningún interés perder unos minutos a diferencia de lo que sucede con la Tercera Edad.
De la mano va, con la inversión por parte de la Municipalidad en estos espacios deteriorados con el tiempo, muchas no tienen una función comercial, donde en el caso de serlo generaría beneficios económicos para la ciudad, sino es un espacio vacío, donde si ponen una nueva banca saben que con el paso de los días podría ser destruida, aquí se liga el sentimiento de pertenencia que motiva a las personas adueñarse y cuidar de las plazas, en muchas no hay un arraigo por parte de los vecinos, existe a su vez un sentimiento de miedo percibido de ser un espacio abierto sin rejas y de libre acceso donde perfectamente se puede estar compartiendo una banca con mi futuro asaltante, ¿me siento segura estando con él?, él no es mi vecino, no me siento identificada con él, mejor me voy, no quiero interactuar con él. Es así como el crecer de las ciudades, la diversificación de la población, la poca interacción con las otras clases sociales, van generando vacíos en estos espacios generados para que la población se relacione, es así como se pierden las identidades culturales arraigadas a un territorio, es así como los mismos vamos sintiéndonos en otros. El desafío planteado es el siguiente, generar un trazado eficiente y que estructuralmente, la Plaza Aníbal Pinto cumpla con los ritmos de la población, dejando espacios para todos los grupos etarios y que a su vez sea segura y atractiva.

miércoles, 6 de abril de 2011

Ocho Tesis sobre el Postfordismo


El postfordismo es entendido como el cambio en el modo de producción, integrando ciertos elementos que caracterizan el siglo en el que nos encontramos, por ejemplo la aplicación de nuevas tecnologías de modo trasversal, no sólo en los sistemas de producción, sino que en su publicidad y marketing, ahora es el consumidor quién decide qué comprar, no está sujeto a modas de ciertos estrictos que lo obliguen a consumir un determinado producto, por lo tanto el mercado debe ampliarse y abarcar la gran cantidad de demanda que existe, otro punto relevante que se generó posterior al cambio en la manera de producir corresponde a la feminización del mercado, la presencia de mujeres de manera más masiva, posibilita una amplitud de mano de obra donde las mujeres pueden especializarse en disciplinas no abarcadas por los hombres. Dentro de las tesis planteadas en el texto, se ha determinado para el análisis la tercera, en primer lugar contempla el postfordismo en donde hay un mercado finito ante la demanda que cada vez se hace más selectiva, imprevisible y su característica fundamental, es que se ha puesto mucho más variable. En este sentido la fábrica debe enfrentarse a una sociedad que no absorbe todo lo que produce, la estructura productiva tiene como misión adaptarse a los caprichos del mercado, entendidos como los cambios de actitudes, maquinaria, niveles de producción, etc. En la relación con la geografía el mercado actual es dinámico, móvil y diversificado, por lo tanto el postfordismo cumple las condiciones de la sociedad, a diferencia del fordismo donde todo se realizaba en líneas estratificadas de producción, la movilidad de los mercados permite una eliminación de los límites existentes, la concepción de la sociedad de los “no límites” permite, tanto que la oferta como la demanda se amplíe, es decir, que no hay un “producto estrella” que todos desean conseguir, ni menos un sistema de producción único, la integración de nuevas tecnologías ha permitido un desarrollo mucho más integro e interdisciplinario, donde no sólo se necesita un tipo de profesional en una empresa, sino un conjunto que posibilite un trabajo mucho más óptimo, regularizado y seguro.